López, quien ha ejercido como exorcista en la Arquidiócesis de México desde 2006, publicó un artículo en la Asociación Internacional de Exorcistas con sede en Roma, donde afirmó que el culto a la “Santa Muerte” es satánico y contiene rituales ocultistas.
El culto a la “Santa Muerte”, cuyo ídolo es una representación femenina de la muerte, ha experimentado un crecimiento exponencial en México, especialmente en el barrio de Tepito en la Ciudad de México. Este culto ha sido vinculado a varios delitos, como el robo, el contrabando, el fraude, el asesinato, el secuestro, el narcotráfico y la trata de personas.
López sostiene que, aunque no es un culto prehispánico, la “Santa Muerte tiene un origen reciente y un pasado lejano” y muestra una obsesión por la muerte y el inframundo que recuerda a los cultos prehispánicos que dominaban la región antes de la llegada de los cristianos europeos. Además, muchos de los rituales ocultos surgieron en Catemaco, un pueblo en el estado mexicano de Veracruz, conocido por sus tradiciones de brujería, chamanismo y ocultismo.
El exorcista afirmó que los seguidores de la “Santa Muerte” a veces realizan “pactos formales con el diablo” a cambio de poderes sobrenaturales, riquezas y buena fortuna, e incluso si alguien no ha hecho un pacto formal, “al menos lo hace internamente”.
«Estos pecados extremadamente graves ponen a aquellos que los cometen bajo el control directo de Satanás y, con permiso divino, pueden fácilmente convertirse en ocasiones para su acción extraordinaria», advirtió.
López mencionó que los exorcistas han encontrado casos de posesiones y ataques demoníacos contra personas que han consumido drogas que fueron ofrecidas formalmente a la “Santa Muerte”.