Mark Jones, ministro de la “Faith Presbyterian Church”, en Vancouver (Canadá), ha advertido a los cristianos sobre el peligro de que la pasión por los deportes se convierta en idolatría.
Jones, quien alguna vez fue atleta y entrenador, ha observado cómo los fanáticos de los deportes muestran cómo los hombres y las mujeres fueron creados para adorar, celebrar la gloria y admirar la excelencia.
En un artículo para Desiring God, Jones compara la experiencia de apoyar a un equipo de fútbol profesional en Inglaterra con la adoración en un culto congregacional.
Para él, la idolatría por el deporte se manifiesta cuando las personas apoyan a sus equipos favoritos. Jones afirma que Dios creó a los humanos para que tuvieran buenos deseos, como amar y expresar alegría.
Sin embargo, nuestra naturaleza pecaminosa a menudo contamina los buenos deseos, haciendo que el hombre adore a la creación más que al Creador.
Para evaluar si el deporte se ha convertido en idolatría, Jones sugiere que los cristianos se pregunten: “¿Nuestro amor por el deporte nos distrae de la adoración colectiva en el Día del Señor o nos distrae constantemente durante la adoración?”. Además, el dirigente recordó que la alegría que provocan los eventos deportivos es pasajera.