Más de 60 personas han sido detenidas como resultado de una investigación policial internacional sobre una red criminal internacional que, en algunos casos, transfirió a mujeres cubanas migrantes a otras organizaciones criminales para su explotación sexual.
Europol, la organización encargada de hacer cumplir la ley de la UE, afirma que la organización criminal introdujo de contrabando a más de 5.000 ciudadanos cubanos en la UE por una ganancia cercana a los 50 millones de dólares.
A través de una aplicación de mensajería, la red de tráfico de migrantes anunciaba sus servicios a los cubanos, organizaba su viaje a Europa y les proporcionaba una identificación falsa. Los contrabandistas transportaban a los migrantes de Cuba a Serbia, luego a Grecia y finalmente a España o Italia.
La red se centró en los cubanos en «situaciones vulnerables», cobrándoles el equivalente a casi 10.000 dólares por sus servicios.
«Ciudadanos cubanos introducidos de contrabando en la UE: rutas cambiantes y modi operandi en un paisaje geopolítico cambiado», dijo una notificación de inteligencia conjunta de la Europol y Frontex publicada en enero de 2023.
Según el informe, las rutas de contrabando rusas se han visto afectadas por la invasión de Ucrania que comenzó en febrero de 2022. Anteriormente, los ciudadanos cubanos volaban a Rusia; ahora, vuelan a Serbia a través de un aeropuerto alemán, donde los traficantes de personas organizan su entrada a Macedonia y Grecia.
«Grandes grupos de inmigrantes se vieron obligados a caminar durante horas en la oscuridad sin comida bajo la dirección de traficantes que utilizaban una variedad de rutas», según la Europol. «Además de estas difíciles circunstancias, los delincuentes se aprovechaban de los migrantes más indefensos, incluidos los niños, y los sometían a estafas, robos y extorsiones. En algunos casos, las mujeres eran vendidas a otras bandas para ser utilizadas como esclavas sexuales».
La agencia afirma que los inmigrantes presentarían solicitudes de asilo en Grecia, o los contrabandistas organizarían su viaje a otras naciones de la UE dándoles documentos falsificados. Los miembros de redes criminales empleaban ocasionalmente la técnica de «parecidos» para permitir la inmigración a la UE. La táctica consiste en robar documentos y dárselos a un migrante que se parece a la víctima del robo.