Según información hecha pública el jueves por el servicio de seguridad Shin Bet de Israel, cuatro ciudadanos árabes-israelíes fueron detenidos por contrabando de armas procedentes de organizaciones vinculadas al grupo terrorista Hezbollah.
Las dos ciudades israelíes en el centro del país, Lod y Kfar Qasem, produjeron a los ciudadanos israelíes detenidos. Los cuatro hombres fueron encontrados en posesión de explosivos fabricados en Irán con la intención de utilizarlos para actividades delictivas. Los mismos han sido incautados por las autoridades.
“Este asunto ilustra una vez más los esfuerzos de elementos terroristas de Hezbolá e Irán para explotar a los ciudadanos árabes de Israel para actividades de seguridad contra el Estado. La investigación también reveló que existe una delgada línea entre la seguridad y las actividades criminales”, según un alto funcionario citado en el comunicado del Shin Bet.
Según un portavoz del Shin Bet, se encontró en Israel una bomba fabricada en Irán. “La operación se completó con la cooperación de la Policía de Israel, el Shin Bet y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Después de una investigación, se descubrió que los sospechosos estaban en posesión de municiones y explosivos de alto calibre, incluidos dos artículos fabricados en Irán”.
Los sospechosos fueron retenidos inicialmente en Kfar Qasem luego de una redada en Lod que resultó en la captura de todos los hombres árabe-israelíes que pretendían utilizar los artefactos explosivos con fines ilegales.