La diputada finlandesa Päivi Räsänen, que fue absuelta del cargo por incitación al odio por expresar sus opiniones cristianas sobre el matrimonio y la sexualidad, tendrá que declarar frente a las autoridades nuevamente.
Una vez más, Räsänen tendrá que comparecer ante el tribunal por un caso relacionado. La fiscalía de Finlandia la acusa de difundir en las redes sociales un panfleto que escribió hace casi 20 años con puntos de vista bíblicos sobre la sexualidad, así como un versículo de la Biblia que llama “pecado” a la homosexualidad.
Räsänen, médica y exministra del interior, ha declarado que no pretendía ofender ni tratar a nadie injustamente; más bien, solo quería defender los derechos religiosos y de libertad de expresión. Sostiene que en lugar de decidir cuál es la mejor manera de interpretar la Biblia, el tribunal debería respetar los diferentes puntos de vista de las personas.
Según la parlamentaria, su experiencia jurídica fue una “pesadilla” y una “locura”, y la comparó con “los tiempos medievales”. Ha afirmado que, si bien es libre de tener en mente cualquier opinión sobre la Biblia, no se le permite expresarla públicamente.
La fiscalía, por otra parte, sostiene que las opiniones de Räsänen son degradantes para las personas homosexuales y violan su derecho a la dignidad humana.
Además, argumenta que numerosas iglesias protestantes apoyan el matrimonio homosexual y las relaciones entre personas del mismo sexo, demostrando que la interpretación de Räsänen no es la única ni la correcta.
En noviembre de este año se conocerá el veredicto del juicio. Räsänen ha declarado que está dispuesta a llevar su caso hasta el Tribunal Europeo de Derechos Humanos si fuera necesario para defenderlo. Si es declarada culpable, podría pasar hasta 2 años en prisión o pagar una multa considerablemente alta.