Tras los conflictos que se desarrollan en Sudán, entre el ejército y un grupo de paramilitares, muchas personas han tomado la dura decisión de huir del país.
Se logró un acuerdo de «alto al fuego» entre las partes para poder garantizar el paso seguro de los civiles. Según Premier Christian News, «Las naciones occidentales, las agencias de ayuda y los trabajadores humanitarios están ayudando en este proceso».
Han sido enviados aviones de la RAF desde Chipre, y fueron rescatados al menos 4.000 titulares de pasaportes británicos, los cuales habían quedado varados al inicio de los intensos combates entre las dos partes en el país de África Oriental.
«La situación es grave y hemos tenido una tregua muy difícil», dijo una investigadora de asuntos africanos, Caroline Duffield. Explicó que hubo tan solo 72 horas para que los gobiernos occidentales se movilizaran para evacuar a las personas y ponerlas a salvo.
A pesar de la situación y de los esfuerzos que han hecho los militares liderados por Italia, quienes han usado aviones de Djibouti, con la finalidad de evacuar a la mayor cantidad posible de ciudadanos, muchos han decidido quedarse, como es el caso de los misioneros de ONG italianas.
«Estamos preocupados por el conflicto y el efecto que tendrá en la población civil», dijo la directora ejecutiva de Bond, Stephanie Draper, quien representa a organizaciones alrededor del mundo en contra de la pobreza, en total 400.
Draper comentó, que dependiendo del trabajo de sus agencias, algunas se quedan y otras se van. Por ejemplo International Medical Corps, pretende seguir con su misión.
«La decisión de quedarse o irse es una cuestión de oración y también de esperanza», aseguró Caroline Duffield.