A raíz del tiroteo en la escuela cristiana Covenant, protagonizado por una mujer trans, los activistas LGBTQ han defendido a sus comunidades.
En una entrevista con The Reid Out del canal MSNBC, una mujer trans, Charlotte Clymer, defendía la idea de que Dios es de género fluido y por lo tanto es transgénero. Charlotte expresó su enojo por los disparos de una mujer transgénero, y dijo que ser trans era algo natural ya que «Dios los había creado así». Clymer también insistió en ir a la iglesia todos los domingos y se describió a sí misma como «una persona profundamente religiosa».
La activista ha criticado a los conservadores por su toxicidad hacia los niños, defendiendo la idea de que “las personas trans y la comunidad LGBTQ en general no son un peligro para los niños”.
«Retaría a cualquiera a conocer a las personas trans. Somos una comunidad vibrante y diversa, tan diversa como cualquier otra», agregó.
«Sabes, soy del gran estado de Texas. Serví en el ejército, voy a la iglesia todos los domingos. Mi fe es muy importante para mí», aseguró.
Así que siguió insistiendo en que:
«Dios me hizo a su imagen. Dios me hizo transgénero».
Charlotte aseguró que este tipo de asesinatos eran consecuencia de personas que criticaban y cuestionaban la ideología de género de la asesina.
«Y ver a estas personas armar esto tan cínicamente y explotar la muerte de estos niños y la muerte de estos maestros, me rompe el corazón. Me pregunto qué estarán pensando esas familias en este momento», finalizó.