“Dios nos preservó” fueron las palabras de decenas de sobrevivientes a un terrible tornado que azotó su iglesia con ellos adentro

Los residentes del centro de Tennessee y los socorristas están lidiando con las secuelas de una tormenta devastadora que mató a 6 personas durante el fin de semana, incluidos un niño de 10 años y un niño de 2 años.

Varias personas fueron hospitalizadas después de que fuertes tormentas y tornados dañaran edificios, arrancaran techos, volcaran vehículos y dejaran sin electricidad durante el fin de semana. Un total de 21 personas resultaron heridas en Nashville, dijeron funcionarios de la ciudad.

Once condados de Tennessee se vieron afectados por tornados y condiciones climáticas adversas el sábado. Los equipos del servicio meteorológico partieron el lunes para evaluar los daños.

Un tornado destruyó viviendas y dejó sin electricidad a decenas de miles de personas en el condado de Montgomery, al norte de Nashville, el sábado por la tarde.

El «Servicio Meteorológico Nacional» en Nashville dijo que el tornado avanzó 45 millas a través del condado a más de una hora de distancia, llegando a los condados de Todd y Logan en Kentucky.

Según la última evaluación de la EMA (Agencia de Manejo de Emergencias), hay 91 estructuras destruidas. La mayoría de estas estructuras son viviendas residenciales, informó el departamento de policía.

Uno de los edificios afectados fue la «Iglesia Bautista Misionera Mt. Olive» en Clarksville, cuyo techo fue arrancado por las tormentas y envuelto alrededor de una encuesta telefónica cercana, según reportó WTVF-TV.

«Ese es nuestro techo. Cuando veo eso, digo gracias, Señor», dijo Wanda Allen, esposa del pastor David y miembro del Concejo Municipal de Clarksville.

Según el reporte de los medios, se informó que el santuario de la iglesia se encuentra en un debastado. Anteriormente, el techo del edificio protegía el auditorio, pero en la actualidad se pueden apreciar enormes trozos de paneles de yeso y aislamiento esparcidos por los bancos, así como una alfombra empapada de agua.

«Nuestra iglesia realmente no está destruida, ese es el edificio. Nosotros somos la iglesia. Somos la gente. Somos una comunidad fuerte y nos recuperaremos. Nos recuperaremos», expresó el pastor Allen a las noticias locales.

Uno de los sobrevivientes contó que al ver venir el tornado corrió hacia su casa con su hijo en brazos e inmediatamente oró a Jesús.

«Saqué a mi hijo lo más rápido que pude, corrimos adentro. Mis dos hijos, mi esposa y yo saltamos al baño y comenzamos a orar a Jesús», dijo el hombre.

El tornado golpeó la Iglesia Bautista Comunitaria en Nashville con numerosas personas presentes. La nave central de la iglesia y el inmueble de eventos fueron destrozados por el vendaval. Varios integrantes padecieron fracturas en los huesos y las extremidades, aunque todos lograron salir con vida.

«Aunque hemos experimentado una devastación sin medida, no perdimos vida. Dios tomó ladrillos, madera y metal y fueron destrozados por un tornado… pero Dios nos preservó», dijo el pastor de la iglesia, el reverendo Vincent Johnson.

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