La Autoridad Palestina canceló el festival anual de Navidad celebrado en Belén para honrar a los «mártires de Hamás» en medio del actual conflicto con Israel.
La Municipalidad de Belén, anunció oficialmente sus planes de prescindir del tradicional árbol de Navidad y las decoraciones festivas en la Plaza Manger, un sitio adornado con alegría navideña desde el inicio de las celebraciones modernas de la temporada.
Es la primera vez desde 1988 que no habra adornos navideños en el lugar de nacimiento de Jesús. Los funcionarios citaron la solidaridad con sus compatriotas en Gaza y honrar a los muertos como razones para cancelar los planes regulares. Si bien continuará la tradicional misa navideña y las oraciones, la ciudad carecerá de su habitual árbol de Navidad y luces festivas. Se prevé que en los próximos días se darán a conocer planes adicionales para el período festivo.
«La razón es la situación general en Palestina; la gente no está realmente interesada en ninguna celebración, está triste, enojada y molesta», explicó un portavoz. «Nuestra gente en Gaza está siendo masacrada y asesinada a sangre fría. Por lo tanto, no es en absoluto apropiado tener tales festividades, mientras hay una masacre en Gaza y ataques en Cisjordania».
Este año, Belén, típicamente un destino turístico bullicioso en el período previo a la Navidad, busca transmitir un mensaje de condolencia y duelo en lugar de celebración. Los peregrinos y turistas, que suelen acudir en masa a la Plaza del Pesebre y a la Iglesia de la Natividad, encontrarán este año un ambiente más tranquilo.
La Iglesia de la Natividad, lugar de nacimiento de Jesús y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, tiene un profundo significado religioso para los cristianos de todo el mundo. Aunque originalmente asociada con Jesús desde el siglo IV d.C., la iglesia existente data del siglo VI d.C.
Ha habido una disminución notable en el habitual espíritu navideño en Belén desde el inicio del ataque de Hamás contra Israel y la guerra subsiguiente. Los alrededores estaban más tranquilos de lo habitual, reflejando la atmósfera lúgubre que había envuelto la ciudad.
El conflicto entre Israel y Hamás estalló el 7 de octubre, desencadenado por la ruptura del alto al fuego vigente por parte del grupo terrorista, que resultó en la muerte de aproximadamente 1.400 personas y la captura de al menos 240 personas.