Hombre fue acusado de crimen de odio al tumbar la estatua de la Virgen María en New York

Se ha informado recientemente que se cometió un crimen de odio en Nueva York, una persona fue vista en cámara destruyendo una estatua de María en la iglesia Rose of Lima de Buffalo.

El Departamento de Policía de Buffalo anunció en un comunicado de prensa que habían detenido a Michael Manns, de 40 años, y lo acusaban de conducta delictiva en tercer grado, como un delito de odio, un delito grave de clase D.

Han pasado menos de dos semanas desde que Manns fue acusado de un crimen de odio luego del ataque a la iglesia el 28 de junio, la policía cree que fue un acto objetivo. Según WIVB, supuestamente se lo vio en imágenes de seguridad escalando la estatua y empujándola hacia un arbusto.

«Los oficiales de Northwest respondieron a una llamada después de que se viera a un hombre destruyendo la estatua de María y huyendo de la escena. Los detectives del Distrito Noroeste iniciaron una investigación de inmediato y se encontró a un sospechoso. La iglesia fue atacada específicamente y, como resultado, el crimen se convirtió en un crimen de odio», según la declaración del Departamento de Policía de Buffalo.

Según el sitio web del estado, «independientemente de la verdad de tal percepción o creencia, se comete un delito de odio cuando se comete uno de varios delitos específicos contra una víctima debido a una raza, color, origen nacional, ascendencia, género, identidad o expresión de género, religión, práctica religiosa, edad, discapacidad u orientación sexual percibidos o creídos».

Estos delitos pueden ir en contra de una persona, un grupo de personas o bienes públicos o privados.

En un acto de solidaridad, los visitantes llegaron a hacer un rosario para la estatua. Sin embargo, la Biblia afirma que Dios detesta la idolatría porque Él es el único que merece la gloria, porque Él es todopoderoso.

Deuteronomio 27:15 dice «Maldito el hombre que hiciere escultura o imagen de fundición, abominación a Jehová, obra de mano de artífice, y la pusiere en oculto. Y todo el pueblo responderá y dirá: Amén».

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