Las adversidades de la vida no impiden amar, servir y crecer, explica el pastor Pedro Dulci

No hay barrera que nos impida vivir, amar, servir y crecer, según el pastor Pedro Dulci, quien compartió una reflexión sobre los desafíos y expectativas que vienen con nuestra vida en todos los ámbitos.

El ministro, autor y teólogo presbiteriano Pedro Dulci publicó recientemente una reflexión en su Instagram sobre cómo la vida nos obliga a salir de nuestras zonas de confort y alejarnos de la tentación de abandonar o postergar metas y aspiraciones.

El pastor compartió en su Instagram hace unos días una imagen con el escrito: “¡No existe el momento perfecto!”.

“Todos estamos tentados a buscar los momentos perfectos para realizar alguna actividad. Seguimos alimentando días ideales en nuestra mente. Y, si estos días idealizados no se dan, nos quedamos sin saber cómo será posible tener éxito en lo que queremos”.

“Sin embargo, en la vida concreta, estos días no existen. Solo sirven para culparnos y poner fuera de nuestro alcance lo que Dios nos llama a dedicar”.

«¿Cuándo alguno de nosotros ha logrado dedicarse a algo (hijos, cónyuge, iglesia, estudios, Biblia, teología, matrimonio) en un período prolongado de tiempo perfecto y sin obstáculos? ¡Nadie! Eso no existe».

«Vivimos en medio de acontecimientos simultáneos. La vida está sucediendo y tenemos el desafío de, en medio de ella, continuar amando, estudiando, sirviendo y creciendo. ¡Todo está bien! No hay nada de malo en hacer muchas cosas al mismo tiempo y no ser exclusivo de una de las responsabilidades que tienes».

«Esto no es una charla de ‘los grandes nombres hicieron historia así, trabajando duro y haciendo varias cosas al mismo tiempo…’ ¡No! Cualquier padre y madre sabe que si quiere estudiar tendrá que dormir 1 hora más tarde o despertarse 1 hora antes. La vida funciona así…».

«A partir de determinados momentos de nuestra vida, cuando ya estamos involucrados en muchas responsabilidades, será imposible añadir alguna actividad sin tener que gestionarla y dividirla con las demás. ¿Qué podemos hacer? ¿Dejamos de leer? ¿No vas a la iglesia? ¿Dejar de reunirte con amigos?».

«¡Claro que no! ¡Simplemente, dejemos de esperar los días ideales y seamos agradecidos y responsables ante Dios por los días que nos quedan!».

 
 
 
 
 
View this post on Instagram
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

A post shared by Pedro Dulci (@pedrolucasdulci)

Deja un comentario