El pasado domingo 24 de septiembre, el delantero Lucas Moura con el São Paulo ganaron la Copa de Brasil y, para conmemorar la conquista, vistió una camiseta que decía: “Pertenezco a Jesús”. Después del empate 1-1 contra el Flamengo, en el Morumbi.
Mientras jugaba en Francia, Lucas Moura compartió recientemente su testimonio de cómo llegó a la fe en Cristo y habló sobre la sensación de seguridad y paz que experimentó después de hacerlo.
Después de 11 años, pudo regresar a São Paulo tras terminar su contrato con el Tottenham de Inglaterra a finales de julio del año pasado.
Ahora que había logrado algo nuevo, imitó el gesto de Kaká, un jugador que se había formado en el tricolor de São Paulo y que se destacó por proclamar su fidelidad a Jesús en sus logros, como la victoria en el Mundial de 2002 y el Trofeo al mejor del mundo en 2007.
Moura publicó en las redes sociales una foto de la camiseta con la escritura improvisada y la tituló: “Fue Dios” quien lideró la situación de su regreso a Brasil y la conquista sin precedentes del club. Su esposa también compartió una foto de él, sus hijos y la copa: “Alguien preguntará, ¿cómo pasó?, usted responderá: ¡fue Dios! Gracias Dios”.
Después del partido, el jugador dijo: “Estoy viviendo el sueño, literalmente. Por todo lo que implicó mi regreso, la movilización de la afición en las redes sociales, incluso algunos jugadores enviándome mensajes. Estoy viviendo un sueño, São Paulo es un sentimiento, está en mi piel, me formé en el club, entré al club cuando tenía 17 años, ahora tengo 31, calvo y con dos hijos, aguantando niños, ya se están burlando de mí (risas). Pero muy contento”.
El deportista expresó su agradecimiento por las bendiciones recibidas en una entrevista con SporTV Live, diciendo: “Nunca había vivido lo que viví hoy, nada se compara, ni siquiera en los clubes en los que jugué en Europa. Nada se compara con lo que viví hoy en Morumbi. Ganar un título con la camiseta del São Paulo es especial, estar en este grupo es especial, un grupo diferente, fantástico, de grandes jugadores y de grandes personas también. Muy merecido. Estoy feliz de ser parte de todo esto, simplemente gracias a Dios, solo él puede explicar estas cosas”.
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