Pastor da gloria a Dios por salvarlo del incendio que consumió su iglesia minutos después de salir de ella

Los bomberos de Dallas respondieron a un incendio de tres alarmas en la histórica capilla de la Primera Iglesia Bautista de Dallas (FBD), una megaiglesia de la Convención Bautista del Sur dirigida por Robert Jeffress.

FBD es la única iglesia del centro de Dallas que permanece en su ubicación original, desde el año de su fundación en 1868, y cuenta con más de 13.000 asistentes. Billy Graham fue miembro de FBD por más de 50 años antes de trasladar su membresía a otra iglesia en Carolina del Sur.

Jeffress comentó a Fox 4 News que había salido de FBD justo antes de que comenzara el incendio. El pastor además mencionó que la iglesia acababa de finalizar su escuela bíblica de vacaciones con más de 2.000 niños asistentes, y agradeció a Dios por su protección, ya que todos los niños se habían ido antes de que comenzara el incendio.

“Estoy agradecido de que la iglesia no esté hecha de ladrillos y cemento ni de madera, sino de personas. El pueblo de Dios resistirá. La Primera Iglesia Bautista de Dallas resistirá, y agradecemos a tantos de nuestros amigos de todo el país que están orando por nosotros en este momento”, dijo Jeffress.

“Por favor oren por nuestra iglesia. Hemos sufrido un incendio en el Santuario Histórica. Hasta donde sabemos, nadie resultó herido ni lesionado y agradecemos a Dios por su protección. Él es soberano incluso en los momentos más difíciles. Los mantendremos informados mientras nos preparamos para reunirnos para adorar”, decía el comunicado de la FBD.

Algunos de los congregantes de FBD, manifestaron que los ataques del enemigo no lograrán disminuir su fe, alegando que la iglesia no es un edificio.

“Satanás está en llamas en este momento. Satanás pensó que con esto nos cerraría el paso, pero acabamos de celebrar un servicio maravilloso en otro lugar. Nunca dejaremos de adorar, porque la iglesia, como dijo el pastor, no es un edificio. Es gente. Nosotros somos la iglesia. Satanás no puede destruirnos”, dijo Isabelle, una vecina.

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