Darryl Flusche, director del Distrito Escolar Independiente de Canyon, comunicó que la Biblia sería retirada de las bibliotecas escolares a causa de una reciente ley estatal, el Proyecto de Ley 900, que condena el contenido sexualmente explícito.
En un correo electrónico filtrado, Flusche aseveró que el texto completo de la Biblia es considerado “material sexualmente explícito”, y a partir de allí se llegó a la decisión de su retirada.
La decisión ha originado una reacción muy poderosa entre los padres de los alumnos, quienes confiesan sentirse confusos y preocupados.
En una reunión de la junta escolar, la madre de un estudiante, Regina Kiehne, calificó de absurdo que se desechara un libro tan relevante como la Biblia, cuando se mantenía en las estanterías del colegio otros textos cuestionables.
“En una época en la que necesitamos guardias de seguridad y ventanas y puertas a prueba de balas, creo que tener la Palabra de Dios disponible para nuestros hijos no solo puede prevenir la violencia, sino también brindar consuelo y una sensación de seguridad en un mundo caótico”, dijo, haciendo énfasis en cómo la juventud está encontrando apoyo en la Biblia debido a la ansiedad.
“La única razón por la que se roba algo es porque es valioso. La Biblia tiene un gran valor. Debería ser valorada en nuestro sistema escolar de Texas”, agregó.
El año pasado, varios legisladores de Texas, como Bill Zedler, del Partido Republicano, hicieron notar la exhibición de los Diez Mandamientos en las aulas, considerándose como el fundamento moral que acompaña a los valores de Estados Unidos.
Sin embargo, de ellos existe la resistencia de los críticos que afirman que esas manifestaciones violan la Cláusula de Establecimiento de la Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos.
Los defensores de esta causa, como Dodie Horton, la diputada estatal de Luisiana, sostienen que el peso que tiene el valor histórico y moral de los Diez Mandamientos sobrepasa las preocupaciones acerca del respeto a la libertad de religión. Este argumento hace hincapié en la necesidad de promover valores morales en el espacio escolar.