En Nigeria, un país que en 2018 fue escenario de un “genocidio” de cristianos, según el abogado nigeriano Emmanuel Ogebe, sigue siendo un territorio hostil para los seguidores de Cristo, donde recientemente una joven estudiante fue secuestrada y amenazada por islamistas locales.
Dorcas Adedayo Adekanola fue secuestrada mientras estudiaba química en la Universidad Estatal de Kaduna. Los compañeros de clase de la cristiana dijeron a sus padres que estaba actuando de manera extraña, como si la hubieran acosado.
El campus de la Universidad de Kaduna está fuertemente influenciado por extremistas islamistas locales que parecen contar con la ayuda de algunos funcionarios del Ministerio de Educación. “Siempre parecía asustada, lo que demuestra que estaba siendo amenazada por los islamistas en el campus”, dijo la CMW (Comunidad de Estudiantes Cristianos), que opera como el ministerio de empoderamiento cristiano del país.
Cuando los padres de Dorcas se dieron cuenta de la gravedad de la situación cuando su hija desapareció, ellos la llamaron, pero rechazaron la llamada de su teléfono celular, como si ella no tuviera el control de su dispositivo.
Como resultado, se contactó a las autoridades locales. El 20 de septiembre la joven fue vista en uno de los autobuses universitarios “propiedad de los musulmanes de la institución”, informó CMW.
Los investigadores locales dijeron que la cristiana fue llevada desde la Mezquita del Sultán Bello en Kaduna a la casa de un líder islámico. Se trataba de un intento de convertirse por la fuerza al Islam, una práctica que se repite en Nigeria y otros países afectados por el extremismo islámico.
Mallama Amina, profesora universitaria, también estuvo involucrada en el secuestro. Las autoridades tuvieron conocimiento de la situación y lo comunicaron al Consejo Nacional Interreligioso, pero la joven sigue en manos de musulmanes y no se permite ningún contacto con ella debido a su conversión.
CMW afirmó a Morning Star News: “Estos campus islámicos están presionando a los cristianos con secuestros, aislamiento, privaciones, acusaciones falsas de blasfemia, calumnias, lavado de cerebro, segregación y manipulación”.