Durante los bombardeos provocados por la guerra entre Israel y Hamás, algunos cristianos encontraron seguro refugiarse en las iglesias. Sin embargo, según Puertas Abiertas, 18 cristianos murieron el jueves por la tarde luego de una explosión.
A pesar de la orden de evacuación de la ciudad, se refugiaron en el recinto de la iglesia. La tragedia se produjo en la iglesia ortodoxa griega de San Porfirio tras el ataque aéreo en Gaza. Esta iglesia es considerada la tercera más antigua del mundo y está ubicada en la parte antigua de la ciudad de Gaza. Construida en el año 425 y restaurada en 1856, está situada junto a la mezquita Khatib al-Wilaya.
Existe cierto debate sobre quién llevó a cabo el ataque. Algunas personas culparon al ejército israelí, pero el sitio web oficial de la Iglesia Ortodoxa Griega negó las acusaciones.
“El ataque aéreo fue una nueva masacre y un ataque al patrimonio cristiano”, lamentó el arzobispo greco-ortodoxo de Sebastia en Jerusalén, Atallah Hanna.
Un líder cristiano en Cisjordania lamentó que los bombardeos hubieran traído “tanto dolor, tristeza y desesperanza” a los cristianos de Gaza.
Los líderes de la iglesia en Jerusalén en una declaración oficial dijeron: “la iglesia sigue comprometida a cumplir con su deber religioso y moral de brindar asistencia, apoyo y refugio a los necesitados en medio de las continuas demandas de evacuación”. “Los ataques a las iglesias y sus instituciones son crímenes de guerra que no pueden ignorarse”.
