Hombre yihadista se convierte después de que Jesús se apareciera en sus sueños

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Kareem, es un hombre que creció en una familia islámica, el cual aprendió dos cosas desde su niñez: entregar su vida a Alá y derrotar a judíos y cristianos.

«Mi vida se construyó y se centró en el Islam», dijo en una entrevista con God TV.

En el pasado, se le conocía como un yihadista. Alrededor del 2002, cuando estalló la guerra en Irak, Kareem dijo que pensó que era su oportunidad de dar su vida a Alá, ya que se le pidió que matara a los «infieles».

Sin embargo, esto no sucedió, el hombre simplemente siguió predicando sobre el Islam.

Hasta que un día, se topó con una publicación en internet que decía «¿Amas a Alá?», el hombre suponiendo que era un sitio web musulmán, hizo clic, pero lo que vio no era lo que esperaba, se trataba de un sitio cristiano y fue de allí que empezó a estudiar la Biblia y aprendió sobre Jesús.

Kareem empezó a reconsiderar sobre sus creencias y por primera vez en su vida pensó que el Islam podría estar equivocado.

«Miré hacia el cielo y dije: ‘¿Sabes qué? Eres tan grande para mí. No puedo encontrarte. Por favor haz algo. Soy tan pequeño a tu lado, pero haz algo para encontrarme'», dijo en su oración.

Esa misma noche, el hombre vio a Jesucristo en sus sueños.

«Estaba corriendo por un camino muy largo y había muchas ramas de árboles llenas de espinas persiguiéndome, queriendo matarme» relató, «Le grité: ‘¡Por favor ayúdame, haz algo!’ Extendió su mano, la puso sobre mi hombro y me acercó a él».

«Tan pronto como me miró, descubrí que era Jesucristo. Me miró profundamente a los ojos y dijo: Es tu momento de seguirme», finalizó.

Al despertar, Kareem creyó que había sido una simple alucinación, pero durante tres noches tuvo exactamente el mismo sueño. Fue en ese instante que descubrió que Jesucristo era más que un profeta, al contrario de lo que los musulmanes le enseñaron.

Con el pasar del tiempo, el ex-yihadista admitió que Dios lo rescató, «Dios me sanó y puedo decir que lo amo. Dios es amor y Él ha puesto Su amor en nuestros corazones». A los tres años de su primer encuentro con Jesús, fue bautizado y ha revelado que desde entonces su vida no ha sido la misma.

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