El pastor Davi Passamani, de 44 años, ha renunciado a su cargo de presidente y líder religioso en la iglesia A Casa después de ser acusado por tercera vez de acoso sexual por un fiel. La iglesia confirmó oficialmente su renuncia después de enfrentar una nueva acusación de importunación sexual.
En 2020, Passamani ya había sido denunciado por el mismo delito.
En su declaración de renuncia, Passamani afirmó que su decisión se debía a la necesidad de cuidar su salud y la de su familia.
La iglesia A Casa también emitió un comunicado en el que expresó su apoyo a la decisión del pastor y afirmó que tomará medidas para garantizar la integridad y el bienestar de sus miembros.
Este no es el primer escándalo sexual que involucra a líderes religiosos en Brasil. En los últimos años, ha habido varios casos de abuso sexual y acoso en iglesias y organizaciones religiosas en todo el país. Estos casos han llevado a un mayor escrutinio y demandas de rendición de cuentas por parte de las víctimas y la sociedad en general.
Es importante destacar que el acoso sexual es un delito grave y que todas las acusaciones deben ser investigadas y tratadas con seriedad. Las víctimas deben ser escuchadas y apoyadas en su búsqueda de justicia y reparación.
La renuncia de Passamani es un recordatorio de la importancia de abordar el acoso sexual en todas las esferas de la sociedad, incluyendo las instituciones religiosas.