En las redes sociales, una parte de un sermón predicado por el pastor Waldemir Farias en la «Iglesia Evangélica Asamblea de Dios Templo Central» en Recife, Pernambuco, se volvió viral. Donde el pastor denunció el comportamiento afeminado en los hombres de la época.
En la grabación se puede escuchar a Waldemir criticando la aceptación de acciones que, a su juicio, son afeminadas como conductas normales en la comunidad cristiana evangélica, y más específicamente en su denominación.
La normalización de gestos típicamente asociados con el comportamiento femenino fue el blanco de las críticas del pastor Waldemir, «los caballeros no deberían, por ejemplo, sentarse con las piernas cruzadas como una dama».
«Empieza por cambiar esos pantalones ajustados que usas. Cuando te sientes, no tengas ganas de cruzar las piernas como una niña, no». El líder religioso reprendió a los seguidores de su secta que consideran que estas acciones son normales.
El extracto de la prédica implica que el pastor ve algunos gestos supuestamente afeminados como una forma de aceptación del estilo de vida LGBT. Es decir, la crítica a la religión no parece estar dirigida a un comportamiento puramente estético, sino a la aceptación por parte de la iglesia de una ideología que la Biblia prohíbe explícitamente.
Los comentarios de la publicación que compartieron el pasaje del sermón del pastor en las redes sociales estaban divididos. El pastor fue elogiado por muchos. Un internauta escribió: «Felicitaciones al pastor por la actitud de predicar la palabra de Dios».
Otros, por otro lado, objetaron el énfasis de Waldemir en los factores «visuales», como el «color de la ropa» o «gestos específicos», alegando que estos no indican la orientación sexual de una persona.
Según un internauta, lo más importante es que las personas sean conscientes de lo que es el pecado y luchen contra él, Por ejemplo, esto se aplicaría a los ex homosexuales, que aunque ya no lo son, no pueden renunciar por completo a los gestos femeninos.
Otro internauta comentó: «Esa palabra mató a más de uno en ese culto, que lucha contra la homosexualidad, jóvenes en construcción espiritual». «Los jóvenes con esta tendencia seguirán experimentando atracción por el mismo sexo, pero menos. Decir no al pecado y sí a la cruz es un signo de liberación».
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