Un ex satanista cuenta su impresionante testimonio luego de salir del ocultismo, al no querer participar en sacrificios humanos

Únete a nuestro canal de Telegram

Hace varios años, Daniel Mastral se convirtió y todavía guardaba detalles sin revelar sobre su proceso de liberación del satanismo, los cuales decidió compartir en una entrevista para el canal “Na Real” de Bruno Di Simone en YouTube.

Durante la conversación, Mastral explicó que una de las razones por las que decidió abandonar el ocultismo y sus prácticas de adoración a Satanás fue su negativa a participar en sacrificios humanos.

“Iba a tener que matar a un niño, había oído hablar de ello, pero nunca lo había visto. Nunca lo había visto así en vivo”, reveló el ex satanista.

El hombre abandonó el satanismo y encontró la adoración genuina de Dios durante un servicio evangélico.

“En ese momento yo estaba saliendo con una chica evangélica y fui a visitar su iglesia”, dijo.

“Había un grupo allí haciendo adoración genuina y verdadera. No fue un espectáculo, no fue un espectáculo. La adoración genuina me derribó, ¿sabes? Perdí el control, me desmayé. Perdí el conocimiento”, explicó.

Además de esto, la novia de Mastral organizó una reunión con el pastor, y a pesar de que el grupo satanista intentó detener al líder evangélico, el hombre fue libre en ese encuentro.

“Mi novia organizó una reunión con el pastor de la iglesia porque quería hablar conmigo. Le lancé un hechizo y fui allí. El pastor tuvo un problema y no fue. Lo hechicé de nuevo, ¿verdad?, tuvo otro problema y no tampoco fue”, dijo.

“La segunda vez, hice un hechizo para matarlo y no funcionó. El tipo estaba vivo. Chocó su auto, pero no sufrió ni un rasguño. Estaba muy indignado por esto, ¿verdad? Y luego los satanistas hicieron un ritual para acabar con él. Y luego fui a la reunión con el pastor lleno de orgullo, de soberbia, pensando: ‘El tipo no va a venir’. Esperé dos horas, cuando me iba llegó el tipo”, añadió.

Durante su reunión con el pastor, Daniel Mastral mencionó que recibió una corta oración, sin sospechar que desencadenaría una intensa manifestación de fuerzas malignas que duraron 3 horas.

“Me llamó y me dijo: ‘¿Puedo orar por ti, muy rápido, una oración? Cosa rápida’. Me llevó a la oficina, cerró la puerta y solo recuerdo una mano viniendo hacia mí. Él oró por mí, caí y luché. Fue como un exorcismo”, dijo.

Tras el exorcismo, experimentó una paz inigualable, lo que marcó el inicio de su carrera teológica que perdura hasta hoy.

“Y que alguien hablara de lo que significa tener paz, fue efímero para mí. Entonces sentí paz, sentí amor, me sentí bienvenido. El Creador, mucho más poderoso que el diablo, me miró, ¿sabes? Solo soy polvo, polvo cósmico, no soy nada, ¿verdad? Y Dios me miró, Dios murió por mí”, concluyó.

Únete a nuestro canal de Telegram

Deja un comentario