En un ataque el miércoles frente a la entrada principal de la «Ciudad Vieja» de Jerusalén, un joven palestino apuñaló a dos personas, dejando a una de ellas con una herida moderada, según las autoridades.
Después de bajarse de un autobús, según la policía israelí, el adolescente atacó a personas cerca de la Puerta de Jaffa. Después de una breve persecución, el sospechoso, un palestino de 17 años de Jerusalén, fue detenido, no se mencionó su nombre de inmediato.
Un hombre de 56 años estaba siendo tratado por heridas de arma blanca en la cara, el cuello y la mano, según el Centro Médico Hadassah de Jerusalén. El hombre resultó herido, pero despierto y en condición estable, según el Dr. Shaden Salameh-Youssef, jefe del departamento de emergencias del hospital Mount Scopus.
El servicio de rescate Magen David Adom de Israel describió a un joven de 17 años con heridas leves por una puñalada en el estómago.
Una de las entradas principales a la Ciudad Vieja, la Puerta de Jaffa, está rodeada por los barrios armenios, cristianos y musulmanes y suele estar repleta de turistas.
La violencia tiene lugar con frecuencia en la Ciudad Vieja, el corazón emocional del conflicto palestino-israelí.
Los sitios en Jerusalén oriental, que son sagrados para las tres religiones monoteístas, fue tomado por Israel durante la guerra de Medio Oriente de 1967, y posteriormente Israel los anexó en una medida que no fue reconocida por la mayoría del mundo.
Cisjordania y la Franja de Gaza, que también fueron tomadas en 1967, serían parte del futuro Estado que los palestinos esperan establecer en Jerusalén oriental.
El ataque tuvo lugar en medio de los peores disturbios que han afectado a Cisjordania y Jerusalén oriental en los últimos 20 años. Casi la mitad de los más de 180 palestinos asesinados este año pertenecían a organizaciones militantes. Israel afirma que si bien la mayoría de los muertos eran militantes, también hubo muertes entre civiles y jóvenes que lanzaban piedras en protesta contra las incursiones militares israelíes.
