Una joven misionera, que sufrió una lesión en el pie y estuvo utilizando muletas durante tres semanas, compartió en su perfil de Instagram el milagroso proceso de sanidad, que vivió a través de la fe en acción, declarando la palabra de Dios sobre ella.
Jey Reis, la joven, describió que era tal el dolor en su pie que no podía ni tocar el suelo.
“Solo poner el pie en el suelo me daba descargas de dolor hasta el punto de llorar. Comenzó con la información de que me había torcido el pie, luego el médico descubrió que mi tendón estaba desgarrado”, contó.
“Y esta soy yo ahora, Dios sana”, dijo mientras saltaba, dando su testimonio basado en Ezequiel 37:3-6.
Después de darse cuenta de que este proceso en su pie estaba en el plan de Dios, Jey compartió que un niño desconocido había orado por ella.
“Mientras él oraba, comencé a sentir sobresaltos, pero no eran sobresaltos de dolor. Empezaron en mi muslo y bajaron como fuego y mi pierna empezó a temblar”, recordó.
“Cuando terminó de orar me quité la bota, levanté los pies y estuvieron firmes en el suelo”, añadió. Ella probó su pie para luego caer de rodillas, agradecida con Dios por el milagro.
“Lo primero que hice después de cinco pasos fue arrodillarme. Me quitaron las muletas, Dios hace milagros y su tiempo es perfecto para las cosas. Tuve que pasar por todo esto para aprender cosas sobre mi vida. Generar un testimonio duele y lleva tiempo”, dijo.
Jey se lastimó el pie mientras servía en el CFNI en Dallas, Texas, donde está cursando estudios de Teología.
A pesar de no saber la causa, siguió con sus tareas diarias. A medida que el dolor se intensificaba, una enfermera indicó que su pie estaba torcido y dislocado, por lo que Jey empezó a utilizar muletas.
“Fue muy triste, porque la niña que no podía parar tuvo que parar. El Señor me enseñó muchas cosas durante este tiempo. Es fantástico tener un testimonio de sanación, pero es mucho mejor poder generar un testimonio de la voluntad de Dios”, dijo.
“Se puede ver la belleza y la mano de Dios incluso en el lugar del dolor”, añadió.
“Independientemente del proceso que estés pasando ahora, quiero decirte: ‘Hay un propósito y hay un tiempo determinado por Dios para que haya un punto final. Dios es fiel y sigue haciendo milagros’”, finalizó.
La joven se ha convertido en influencer y fue de las primeras en usar TikTok para predicar a Jesús, llegando a ministrar en 15 países y siendo reconocida por su labor como misionera.