En una historia de supervivencia que ha capturado la atención de millones, una joven de 17 años llamada Kenzie, se convirtió en el centro de una historia milagrosa, así lo informó Guíame.
Después de un violento choque contra una estructura de hierro, Kenzie emergió con apenas unos rasguños, a pesar de que su vehículo quedó completamente destruido.
El accidente ocurrió en Bradford, Pensilvania, cuando Kenzie, distraída por su teléfono celular, perdió el control del coche. Sin embargo, la tragedia se transformó en un testimonio de milagro, cuando Kenzie logró sobrevivir.
Kevin Mullins, el padre de Kenzie, compartió la noticia del accidente, a través de un video, que rápidamente se volvió viral, acumulando más de 15 millones de visitas. En el video, Kevin muestra el coche destrozado y luego a Kenzie, sana y salva, en otro vehículo.
La joven informó que no se dio cuenta de lo cerca que estaba de la estructura de hierro hasta que salió del vehículo. A pesar de la magnitud del accidente, Kenzie solo sufrió heridas menores en las manos y los pies.
El padre de Kenzie, atribuyó su supervivencia a un acto divino, expresando su fe en un poder superior, que protegió a su hija en ese momento crítico. Kevin declaró: “Sirvo a un Dios increíble”, y calificó el evento como un milagro.
El incidente sirvió como un recordatorio sombrío, y a la vez esperanzador, sobre los peligros de la distracción al volante. Kevin aprovechó la oportunidad, para aconsejar a los conductores, que mantengan la vista en la carretera, en todo momento. La historia de Kenzie, no solo es un relato de supervivencia, sino también una llamada de atención, sobre la importancia de la seguridad vial, y la presencia de milagros, en la vida cotidiana.
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